Tratamiento eficaz para mejorar la calidad de vida
30 a 45 minutos
Leve
El pterigión es un crecimiento anormal de tejido conjuntival que se extiende desde la conjuntiva sobre la córnea, generalmente en el lado nasal del ojo. Esta afección puede causar irritación, enrojecimiento, visión borrosa y, en casos severos, puede afectar significativamente la visión. La cirugía de pterigión es el tratamiento más efectivo para eliminar este crecimiento y mejorar la calidad de vida del paciente.
La cirugía de pterigión se realiza generalmente bajo anestesia local y dura aproximadamente 30 a 45 minutos. Existen varias técnicas, pero la más común y efectiva es la escisión con injerto conjuntival autólogo. El procedimiento incluye los siguientes pasos:
Se elimina el tejido del pterigión de la córnea y la esclerótica.
Se toma un pequeño injerto de conjuntiva del mismo ojo (generalmente de la parte superior) y se coloca en el área donde se eliminó el pterigión. Esto ayuda a reducir el riesgo de recurrencia.
El injerto se fija en su lugar con suturas finas o adhesivo de fibrina, un pegamento biológico.
Después de la cirugía, el ojo se cubre con un parche durante unas horas. Los pacientes pueden experimentar molestias, enrojecimiento y lagrimeo durante algunos días. Se prescriben medicamentos tópicos como antibióticos y antiinflamatorios para prevenir infecciones y controlar la inflamación. La mayoría de los pacientes pueden reanudar sus actividades normales en pocos días, aunque se recomienda evitar la exposición al polvo, viento y luz solar intensa durante al menos una semana. El uso de gafas de sol puede ser beneficioso para proteger el ojo y mejorar la comodidad.
La cirugía de pterigión tiene una alta tasa de éxito y la mayoría de los pacientes experimentan una mejora significativa en sus síntomas y apariencia ocular. Sin embargo, existe el riesgo de recurrencia del pterigión, especialmente en personas expuestas a factores de riesgo como la luz ultravioleta. Entre las complicaciones raras se incluyen infecciones, cicatrización irregular y problemas con el injerto conjuntival. El seguimiento postoperatorio es crucial para monitorear la recuperación y tratar cualquier complicación de manera oportuna.
La cirugía de pterigión es una opción efectiva para aquellos que sufren de esta afección ocular. Al elegir un cirujano experimentado y seguir las recomendaciones postoperatorias, los pacientes pueden lograr excelentes resultados y una notable mejora en su calidad de vida ocular. La prevención, mediante el uso de protección ocular adecuada, también es clave para minimizar la recurrencia y mantener una salud ocular óptima.